La oferta de juegos y juguetes infantiles no para de crecer y cada vez es más difícil escribir la carta a los Reyes Magos o acertar con el regalo de cumpleaños perfecto.
Elegir un regalo para un niño o niña no siempre es fácil. Si, además, queremos que sea un juguete libre de sexismo y estereotipos, que sea respetuoso con su desarrollo y que, además, nuestro/a hijo/a no lo acabe dejando en un cajón a los tres días, la misión se complica.
Para ayudarte a tomar una decisión sobre qué regalar a tu hijo o hija, te he preparado 4 recomendaciones que creo que deberías tener en cuenta antes de comprar cualquier juguete.
1. Los juguetes NO son para niño o para niña; los juguetes SON para jugar.
Ya es hora de dejar de clasificar los juguetes como «juegos para niños» y «juegos para niñas». Solo así, eliminaremos los trabajos, comportamientos, estudios y reglas «para hombres» y «para mujeres». Y frases como «médicos y enfermeras» nos chirriarán a todos y todas.
Si queremos una sociedad igualitaria, debemos empezar por educar en igualdad. Estos Cuentos sobre Igualdad para niñxs que cambiarán el mundo pueden ser un buen comienzo. Pero, más allá de explicar a los niños y las niñas que pueden ser lo que quieran ser sin importar su género, es necesario que así lo vivan.
Por esta razón, te animo a comprar muñecas, balones, camiones, cocinitas,… a tus hijos y a tus hijas por igual.
2. Cuanto más hace el juguete, menos hace quien juega.
A menudo, tendemos a pensar que cuanto más sofisticado y tecnológico sea un juguete, más estimulará la creatividad y habilidades de nuestros hijos e hijas. Y, en realidad, es todo lo contrario. La mejor forma de despertar la imaginación y desarrollar las habilidades cognitivas y sociales de nuestros/as hijos/as es dándoles la oportunidad de crear sus propias historias con juguetes sencillos.
Además, los juguetes demasiado complejos y aquellos que captan la atención de los niños y las niñas gracias a multitud de ruidos y movimientos, pueden provocar una falta de atención y concentración y un déficit de autocontrol. Por esto, no es recomendable este tipo de juegos para niños/as menores de 6 años y, muy especialmente, para menores de 2 años.
3. El juguete depende del desarrollo del niño/a, y no al revés.
A todos los padres y todas las madres les gusta ver cómo avanzan sus hijos/as. Es normal sentir orgullo e ilusión la primera vez que tu hijo/a coge un objeto, coloca un encajable en su sitio o se pone de pie. Y, si vemos que alguna de estos logros ocurre antes de lo esperado, la alegría es aún mayor.
Por supuesto, es muy positivo estimular el desarrollo de los niños y las niñas y ayudarles a alcanzar todo su potencial. Sin embargo, no es lo mismo estimular que forzar. Y regalar a un niño/a un juguete para el que no está preparado puede ser perjudicial para su desarrollo.
Por esto, es necesario conocer las características de la etapa del desarrollo en la que se encuentra nuestro/a hijo/a. Los principios y herramientas de la Disciplina Positiva te ayudarán a conseguirlo.
Así que, elige siempre juguetes acordes a la etapa de desarrollo de tu hijo/a y respeta sus tiempos. Estos Libros y cuentos sobre Educación Emocional te ayudarán a conocer y fomentar el desarrollo emocional de tus hijos/as.
4. Muchos juguetes, poca ilusión.
La publicidad, la sociedad consumista en la que vivimos, la ilusión de padres, madres, abuelos, tías,… por llenar de regalos a los/as niños/as hacen muy muy difícil poner límite al número de juguetes que nuestros hijos e hijas recibirán en Navidad o en su cumpleaños.
Y, admitámoslo, nos encanta ver la ilusión con la que llenan la carta a los Reyes Magos con todo lo que quieren. Y estamos deseando ver sus caritas cuando descubren que Papá Noel o Sus Majestades de Oriente han cumplido sus deseos.
Pero no es menos cierto que, con mayor frecuencia de la que nos gusta reconocer, esta ilusión no dura tanto como pensábamos. Incluso oímos casi sin creerlo frases como «esto no era lo que quería» o «el de mi amigo/a es mejor«. También es muy común que, a los pocos días, los juguetes se queden almacenados y olvidados en un rincón.
Un exceso de regalos puede tener más consecuencias negativas de las que pensamos, como falta de atención debida a la sobreestimulación o una mala gestión de la frustración cuando no consiga lo que quiere.
Para que tu hijo/a valore y disfrute los regalos de Navidad o de su cumpleaños, pon un límite a la cantidad de juguetes que recibirá y, sobre todo, asegúrate de tener tiempo para jugar con él o ella. Al fin y al cabo, no hay mejor regalo que el tiempo en familia. Y, para disfrutar de este tiempo, nada mejor que elegir Los mejores Juegos de Mesa para Familias.
Si quieres leer más recomendaciones sobre los juegos y juguetes beneficiosos para los niños y niñas, te recomiendo este artículo de la Sociedad Española de Pediatría.